Durante la semana del 5 al 9 de agosto del presente año, se reunió el equipo de investigadoras y parte del personal técnico del proyecto Fondecyt Regular 1221159 en dependencias de la Universidad Arturo Prat, ubicada en el norte del país, en Iquique. Esto con el fin de analizar los datos logrados a la fecha, correspondientes al objetivo 3 del proyecto, el cual pone su foco en el modelo de justicia social de las políticas de identidad propuesta por Charles Taylor, que distingue entre reconocimiento igualitario y reconocimiento identitario. 

En esta ocasión, se buscaron códigos comunes y aquellos que distinguen las distintas aulas comunitarias dialógicas que participan en el proyecto, las cuales pertenecen a las regiones de Tarapacá, Coquimbo, Región Metropolitana, Maule y Biobío.  

Al respecto, la Investigadora Responsable del proyecto, la Dra. Donatila Ferrada manifestó su conformidad por los avances en la recogida de datos logrados en las distintas regiones del país, lo cual permite ajustarse a lo previamente programado en el proyecto. Así también, declaró que «estos resultados preliminares permiten avizorar que estás aulas son promotoras de reconocimiento igualitario e identitario, y nos dan luces sobre la importancia que cumple la comunidad que participa en el trabajo de aula, en lo que a generación de prácticas de justicia social refiere».   

Por su parte, la co-investigadora Dra. Gianina Dávila, a cargo de las aulas estudiadas en la región de Tarapacá, reflexionó sobre el rol de las familias en el trabajo habitual de las escuelas señando que “para las ellas, habituarse a una participación más protagónica en lo pedagógico, tiene un período que fluctúa entre 1 a 2 meses, considerando que las aulas comunitarias establecen compromisos de reuniones habituales. El trabajo en comunidad es complejo de establecer, pero las diferentes comunidades coinciden en volverlo un trabajo a largo plazo, por los beneficios formativos que se evidencian entre los participantes”.  

De la misma forma, la Dra. Blanca Astorga se refirió a las aulas de la Región Metropolitana como “espacios colectivos de crecimiento, validación, reflexión y construcción respetuosa de identidades, características que se identifican en todas las aulas y nos demuestran que siempre es más fructífero el camino en comunidad, desde la dialogicidad, por sobre todo cuando se trata de justicia social”  

Finalmente, la co-investigadora Mg. Alejandra Torres concluyó sobre las aulas de la región del Biobío a su cargo “que ambas aulas están consolidadas en cuanto al trabajo y experiencias de dialogicidad con los estudiantes, entre los estudiantes y demás».